ME CASÉ CON UN BOLUDO (Argentina, 2017)

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UNA HISTORIA QUE TE ATRAPA

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​​        Soy devoto del cine de comedia argentino y eso me llevó a la sala a ver esta película y su aval era que repetía el equipo creativo y artístico de “Un novio para mi mujer” (2008). El director Juan Taratuto volvió a reunir a Adrián Suar y a Valeria Bertuccelli para contar la historia de una pareja de actores que se enamoran trabajando juntos en su primer film juntos. Al tiempo se casan y luego, empiezan a conocerse y no es todo lo bonito que ella pensaba.

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            De Taratuto podríamos decir que a mí me encantó muchísimo su “opera rima” “No sos vos, soy yo” (2004) pero que lleva una más que interesante trayectoria. Aquí vuelve a repetir la fórmula que ya le había funcionado con “Un novio para mi mujer” pero me parece que esta me gustó un poco más. A lo mejor el tiempo que ha pasado hace que no me acuerde tanto de las sensaciones de cuando la vi, pero la que tuve esta vez, cuando salí de la sala, era de habérmelo pasado muy bien y de haberme reído con una comedia cargada de crítica social. Y ese tipo de películas me ganan siempre.

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            Quizás uno de los culpables de este éxito es haber repetido, también, con el guionista Pablo Solarz con el que pude estar hace poco en su nueva película como director “El último traje” en el que mi padre hace de doble de manos de Miguel Ángel Solá, el protagonista. Es difícil enjuiciar la labor de alguien cuando lo conoces y más, si te cae genial, pero en esta parte creo que seré objetivo si digo que a Solarz le salió una película  entretenida, con chistes que aportan a la trama principal y no al revés (que suele ser la causa del hundimiento de algunas comedias). Es más, focalizar la película en Florencia, el personaje que interpreta Valeria, es un acierto ya que nos posicionamos del lado del débil del que sufre el agravio y ayuda a poner más en ridículo, si cabe, al personaje de Fabíán, el marido.

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            La trama de la película avanza a medida que va cambiando la psicología de la esposa y eso la hace un poco más divertida porque nos hace ponernos en su pellejo. Quizás, el único fallo que le veo es al personaje del marido, es que tiene muchos y brillantes giros al principio de la película, pero luego se queda un poco plano al final. Se echó de menos dotarlo más de riqueza de matices en esa parte de la historia. Además, me parece genial que el detonante de la trama es que ella no es capaz de llorar bien en un plano de la película que están rodando y luego, el personaje se tira toda la película llorando. Brillante.

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            Los actores perfectos los dos en sus papeles. Bertuccelli enamora solo con hablar. Y dotarla de papeles de personajes con su punto de interior descentrado le pega de maravilla. Puede parecer loca y encantadora a la vez. Adrían Suar correcto en su papel en el que parece interpretarse a sí mismo. Lo que si es cierto es que el tándem funciona. ¿Cuántas películas no hemos visto que se hunde porque la pareja de protagonistas no tiene química? Aquí se nota que la hay entre los dos. Ya se notaba cuando habían trabajado juntos, con lo cual esa parte la tenía Taratuto asegurada. Esperemos que esto se convierta en trilogía y veamos de nuevo al equipo juntos Taratuto-Solarz-Suar-Bertuccelli en una nueva historia de romance, parejas y conflictos por doquier.

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            Si quieren ir a pasar un rato entretenido sin más fin que ese o, incluso, si quieren ver una comedia en la que buscar las claves de la sociedad en la que nos toca vivir, con este film no saldrán decepcionados. Disfruten mucho.

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​Valoración: MUY DIVERTIDA